Esta pieza fue pintada en colaboración con la artista Estefany Vidal, la mitad izquierda de la obra está pintada en arte fluido y la mitad derecha está pintada por Yamile Orozco con una composición de flores, hojas y pequeños lobos. El lobo como protagonista de la obra, resalta en el centro de ésta, con la fuerza de su mirada y los tonos de su pelaje, sobre un fondo oscuro de tonos azules que evoca una noche fría.